Antes y después
«Mi primera reacción fue “no necesito a nadie que organice mi espacio y mis herramientas, ya lo puedo hacer yo mismo, y ya sé lo que tengo y cómo lo quiero tener”. Y nada más lejos de la realidad.
Gracias a Marta, a su criterio profesional y sobre todo a su empatía y pasión por ayudar a mejorar la vida de sus clientes, no solo convirtió una estancia en un lugar eficiente y agradable, donde vivir y sentirte orgulloso, sino que me enseñó cómo de mejor podemos vivir si profesionales como ella nos echan una mano.
Gracias por este paso hacia adelante y por hacer que cada día quiera más mi casa.»
«Facilidad de trato, rapidez y buenas ideas serían las palabras que definirían la experiencia con Marta.
De una conversación familiar surgió la idea de que tal vez había llegado el momento de hacer aquello que a veces cuesta tanto: desprendernos de pequeñas cosas que tenemos y que, sencillamente, porque nos traen recuerdos, no acabamos de llevar a término. Hablando con mis hijos creímos oportuno empezar por la cocina y la despensa de casa. El resultado ha sido extraordinario. Ahora todo es más fácil de encontrar.
Destacar, además que Marta se ha ocupado de donar lo que ha salido de casa a las familias más necesitadas.
¡Gracias Marta por un trabajo tan bien hecho!»
Antes y después
«Pedimos ayuda a Marta porque llegó un momento en que sentíamos que era necesario ordenar, especialmente con las cosas de nuestro niño. Habíamos ido acumulando juguetes y no sabíamos por dónde empezar. Entrar en la habitación de juegos nos generaba malestar porque había muchas cosas, puestas de cualquier forma y en cualquier lugar. Era un caos y era difícil decirle a nuestro hijo que ordenara, cuando no había un orden claro que él pudiera seguir.
El proceso fue fácil y muy gratificante. Marta nos fue guiando y fue muy respetuosa con las decisiones que se fueron tomando. Finalmente, salieron muchos objetos de casa de los cuales nos daba pena desprendernos por el tiempo que hacía que los teníamos, pero que ya no eran necesarios y que tampoco hemos echado de menos. Asimismo, dimos un sitio a casa cosa, de manera que mantenerlo todo en su lugar ha sido muy sencillo y ahora todo sigue ordenado.
Mientras íbamos ordenando, teníamos ganas de seguir haciendo lo mismo con el resto de espacios de casa y es lo que hemos ido haciendo. Acabamos muy cansados, tanto físicamente como mentalmente, pero supersatisfechos por el trabajo hecho y muy contentos. ¡Sin duda lo recomiendo a todo el mundo!»
Antes y después
Antes y después
«En primer lugar, queremos comentar que no habíamos oído hablar nunca sobre la posibilidad de poder recibir asesoramiento en casa para ayudarnos a poner orden en nuestro espacio personal, y ha sido un gran descubrimiento que recomendamos.
Hacía tiempo que intentábamos poner orden en un espacio que visualmente no nos gustaba nada, un espacio que muchas casas tenemos: “el espacio de los juguetes”. No sabíamos por dónde empezar. Poder recibir una visión y opinión externa nos ha abierto una puerta, hemos descubierto una nueva forma de ordenar, una nueva manera usar y saber valorar las cosas, saber escoger… ¡y nuestra hija pequeña también ha aprendido mucho! La sesión se desarrolló de una manera muy natural, y sobre todo muy divertida tanto para los peques como para los mayores.
Todos no sentimos partícipes del proceso y del resultado final.
Este intercambio a la hora de ordenar permite encontrar nuevas ideas para otros espacios, nuevas maneras de hacer, de ordenar… Al acabar la sesión y ver el cambio, te sientes muy satisfecho, ves como aquel espacio que no te gustaba nada se ha convertido en un espacio acogedor, donde todo es fácil de encontrar, donde todo tiene su lugar y esto transmite calma.
Una casa está llena de espacios que a menudo no sabemos cómo ordenar, y el hecho que alguien te ayude te permite hacer un cambio muy positivo y hacer que te sientas aún mejor en tu casa. Es una experiencia nueva y diferente, gracias a la cual toda la familia hemos aprendido.
Marta siempre encuentra potencial en cualquier espacio, pero siempre teniendo en cuenta tu opinión.
¡Muchas gracias por la paciencia, las ganas de hacer, tu proyecto diferente, y por convertir “el espacio de los juguetes”, en un sitio en el que nuestra hija se siente mejor que nunca!»
Antes y después
Antes y después
